viernes, 1 de diciembre de 2006

BIOSEGURIDAD


¿CUANTO VALE LA VIDA?

BIOSEGURIDAD: UN CONCEPTO CLAVE EN LA REPARACIÓN


Cuando se debe reparar un equipo médico en general o más precisamente de diagnóstico, se debe tener en cuenta que por él pasaron pacientes enfermos, en tratamiento, otros que aún deben ser diagnosticados o lo que significa un riesgo mayor: material biológico.
No es posible abordar el tema bioseguridad sin conocer básicamente algunos conceptos de Microbiología. Esta ciencia estudia los organismos microscópicos como bacterias, mohos (hongos y levaduras), parásitos y virus. Todos ellos pueden estar contenidos en una muestra patológica, algunos productores de enfermedad y otros banales.
En los equipos biomédicos en general y de laboratorio en particular se procesan materiales biológicos como: Sangre entera, Suero, Orina, Materia fecal, Líquido cefalorraquídeo (LCR), exudados de distinto origen y tejidos (en el caso de laboratorio de patología).
Cada uno de éstos elementos se procesan en equipos como centrífugas, baños termostatizados, estufas de cultivo, contadores de células, microscopios, micrótomos y algunos otros que cada laboratorio utilice. Con la automatización de los ensayos, la muestra acorta su camino hacia el diagnóstico y la manipulación es mucho menor.
En el caso de la sangre, luego de centrifugada se coloca en el autoanalizador y se realizan los análisis en forma automática, no obstante existe un paso imposible de eludir que es la centrifugación.
Como sabemos, la centrífuga es un aparato indispensable en todo laboratorio. En los mas equipados se dispone de una para orinas y otra para sangre. Ambas conteniendo en su interior una altísima carga biológica.
De la misma forma en que el técnico o Bioquímico se coloca guantes de látex, barbijo y antiparras, además de protegerse con u guardapolvos para la manipulación de la muestra, el Técnico en Electromedicina también debe hacerlo para extraer los portatubos o examinar el equipo.
Por esa centrífuga, sobre todo si se trata de un efector público, han pasado sueros sanos y otros de variada patología, algunos con más de una e infecciosa. Hasta donde sabemos, las enfermedades más comprometidas que pueden transmitirse por rasguños o por el contacto de una herida o mucosa con restos de material biológico contaminado son: HIV y Hepatitis B o C.
CÓMO PRESERVARSE?
La utilización de guantes es indispensable. No existe una reglamentación para el Técnico en Electromedicina, pero lo correcto para quien trabaja en forma independiente es que la persona que solicite el trabajo proveerá de guantes si se realiza in situ. De realizarse en el taller, el solo hecho de transportar una centrífuga u otro equipo implica la posibilidad de tansportar también material infectado, por lo que debe hacerse con guantes y en lo posible habiendo desinfectado el mismo con hipoclorito de sodio (Agua lavandina diluida) o con Formaldehído diluido, dejando el equipo unos minutos en cntacto con el biocida. Esto garantiza una adecuada desinfección.
En el proceso de revisión y al introducir las manos enguantadas dentro de la centrífuga para extraer los portatubos y el cabezal, se dificulta muchísimo ésta tarea con el uso de guantes. Tomar una llave o un extractor roscado de los utilizados para la extracción de cabezales es casi imposible usando guantes, sobre todo por la baja resistencia que adquiere el látex en contacto con derivados del petróleo como son los lubricantes y por la fuerza que se efectúa con la herramienta, además de la lógica transpiración.
Por otra parte no he visto con frecuencia guantes tamaño XXL como para ser utilizados por muchos colegas, apenas se pueden hallar tamaño L, lo que dificulta aún más la exploración.
Una vez abierta la centrífuga y desarmada, pueden hallarse restos de material biológico por debajo del cilindro metálico, o sobre el suelo. Este es un material peligroso y potencialmente infectado.
Si el inconveniente está en el variador de velocidad, en el timer o en el circuito digital, los riesgos son menores que cuando el motor está dañado, puesto que la extracción del mismo implica mayor tiempo de operación y mayor contacto con el elemento contaminado, manipulando áreas filosas.
De tratarse de una microcentrífuga para microhematocrito, todo riesgo es mayor, puesto que en muchos casos los tubos capilares, tapados en un extremo con plastilina, suelen vaciarse y la sangre entera impacta sobre la tapa de las mismas o sobre la goma que los contiene dentro del rotor.
En algunas cátedras me han colsultado sobre qué hacer cuando un alumno tiene conjuntivitis y desea rendir un examen. Quien llegue después a los oculares podrá contagiarse. No hay mayor enemigo de las lentes que el agua.

Un microscopio presenta menor riesgo pero no la ausencia del mismo, con el inconveniente de que no puede hisopar con lavandina ni con formol, simplemente se puede pasar por la platina y parte del estativo, un trozo de algodón humedecido con una solución de 10 gotas de formaldehído al 40% (formol comercial) en 50 ml de alcohol de 90°, esperando que se evapore el alcohol y que los vapores de formol no irriten las mucosas del operador.
Cuando un cliente solicita un presupuesto, sea de un equipo cuya reparación es factible o nó, debe arancelarse puesto que el riesgo que demanda el contacto con el mismo implica un alto valor agregado ya que la salud no tiene precio.
(PARA MSN GRUPO DE ELECTROMEDICINA, 1995)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ENVIAME TU MAIL Y ESTAREMOS EN CONTACTO.